Capítulo 54.

CAPÍTULO 54. ‘’Enfrentamientos’’.

Narra Verónica.

-Yo: Vamos, son las 10 y media, a las 11 tengo que estar en casa, ¿no recuerdas? Despierta cielo.-Dije zarandeándolo del brazo.

Él soltó un gruñido y abrió los ojos, volteo y me miro.

-Harry: Te odio un poco.-Dijo su extremada ronca voz, normal acaba de despertarse, más ronca aún.

-Yo: ¿Si me odias porque me tienes en tu cama?.-Reí.

Él no dijo nada, solo clavaba sus ojos en los míos, se acercó a mí y me cogió por la cintura volviéndome a tumbar ya que estaba sentada.

-Harry: te odio.-Susurró en mis labios los que después succionó con un beso, presionó sus labios con los míos se adentró en mi interior, peleando con mi lengua, la que recorrió de arriba abajo, termino mordiendo mi labio inferior lo que me hizo gruñir.

-Yo: yo también te odio.-Sonreí en sus labios. Ahora vamos, venga.

Él bufo y se levantó a regañadientes.

…

-Yo: Y tú, ¿Qué vas a hacer hoy?.-Dije mirando por la ventanilla, mientras él conducía concentrado en el asfalto.

-Harry: Voy al gimnasio con tu hermano.-Dijo con la vista en el volante.

-Yo: Estáis obsesionados.-Reí.

Él me miro unos segundos y me sonrió para después volver su vista a la carretera.

El final del trayecto fue tranquilo, solo se oía la radio, al fin llegamos, bajamos y entramos en mi casa dónde mi madre y mi hermano desayunaban.

-Yo: Buenos días.-Dije sonriendo.

-Harry: Buenos días.-Sonrió.

Mi madre y Víctor: Buenos días.

-Víctor: ¿Queréis desayunar?

-Yo: No, ya comimos en el hotel.

Mi hermano asintió y siguió con su batido de frutas.

-Mi madre: Sentaros.-Sonrió.

Hicimos caso y tomamos asiento, Harry se sentó a mi lado y al otro mi madre.

-Víctor: Harry, entonces ¿vienes conmigo al gimnasio?

-Harry: Cuenta conmigo.-Sonrió. Se me olvidó la ropa de deporte, pasaremos por el hotel antes si no te importa.

-Víctor: Claro, subo a por mí  bolsa y nos vamos.-Dicho esto se levantó y subió dando saltos por las escaleras, yo reí.

-Mi madre: Ya veo que eres otro apasionado del deporte como mi hijo.-Rió.

-Harry: Digamos que un poco sí.-Rió.

-Mi madre: ¿Y practicas algún deporte en especial?

-Harry: Fútbol y boxeo, es lo que más me gusta.-Afirmó.

-Mi madre: Eres un clon de Víctor.

Yo empecé a reír, la conversación entre mi madre y mi novio era graciosa.

A los pocos minutos bajo mi hermano ya listo, Harry se despidió de mi madre con dos besos y los acompañé a la puerta.

-Yo: ¿Te llamo cuando llegue?.-Dije colando mis brazos por su cintura y pegándome a él.

-Harry: Te lo exijo.-Dijo cogiendo mi cara con sus manos y dándome un tierno beso.

-Víctor: em, *carraspeó* estos momentos para cuando estéis solos ¿vale?.-Dijo riendo.

Yo me separé de Harry y fui hacia él.

-Yo: eres un idiota.-Dije apuntándolo con el dedo. Cuídamelo o te mato.-Dije riendo.

-Víctor: Que miedo tengo.-Rió. Tranquila, estará bien.-Sonrió.

Me acerqué y bese su mejilla, después se fueron. Yo volví a la cocina con mi  madre.

-Yo: Y bien, ¿Qué quieres hacer?

-Mi madre: hace tiempo que no vamos de compras, ni a la peluquería, ni a hacernos las uñas, ni esas típicas cosas de mujeres.-Rió.

-Yo: Pues no se hable más, me doy una ducha y nos vamos.-Ella asintió y yo subí las escaleras para prepararme.

Él día estaría bien.-Me dije.

Narra Víctor.

Fuimos en el furgón de Harry hasta llegar al gimnasio. Él trayecto fue divertido, no paramos de decir tonterías y hablar idioteces, cosas de hombre.-Pensé.

-Víctor: Joder, hoy si que hay gente aquí, parece que va a haber pelea.-Dije entrando al salón, había demasiada gente, esto era extraño.

-Harry: ¿pelea? ¿Aquí se pelea enserio?.-Dijo sorprendido.

-Yo: Sí, pero no.-Reí.

Él puso cara de confusión, normal.

-Víctor: Vamos a los vestuarios  y allí te explico.-  Asintió y me siguió, nos dirigimos a los vestuarios mientras nos cambiábamos.

-Víctor: Aquí no se pueden hacer peleas enserio, pero una vez dos tipos la organizaron, supieron cómo hacerlo y acabaron bastante mal, recuerdo que uno terminó en el hospital.

-Harry: ¿Tú has peleado enserio alguna vez?.-Preguntó con curiosidad.

-Víctor: No, nunca y ahora menos, le prometí a Vero que no lo haría.

Él asintió, terminamos de cambiarnos, en realidad lo que hicimos fue quitarnos ropa, ambos nos quitamos las camisetas, quedamos en pantalones y zapatillas.

-Víctor: Vamos a darle hoy duro a los puños, ¿te parece?

-Harry: Empecemos.-Me sonrió.

Fuimos andando entre la gente hasta llegar a la zona de boxeo, estaba repleta y la gente estaba alrededor del ring, esto me olía mal.

-Víctor: Espera aquí, algo no va bien.-Dije indicando que se esperara en los sacos.

Él asintió y se quedó allí.

Yo me logré meter entre la gente y cuando vi quiénes eran los que había en el cuadrilátero mi cara cambio por completo, no podía creerlo, era el cabrón de Sergio, ¿Qué hacía? ¿Iba a pelear con otro? Un tipo bastante más rudo que él estaba frente a él y ambos tenían intenciones de comenzar una pelea. Mi mandíbula se tenso, todos mis músculos se contraían. Yo tenía que matarlo.

Me acerqué a Harry lleno de ira, no le dije nada, solté las cosas y volví hacia el ring pero una mano en mi hombro me detuvo. Voltee y era Harry.

-Harry: ¿Qué pasa Víctor?.-Me miro preocupado.

-Víctor: Van a pelear enserio, y para mi sorpresa uno de ellos es Sergio, no sé cuando ha vuelto ni nada, solo sé que está aquí y no con buenas intenciones.-Dije enfurecido.

En ese momento observé el rostro de Harry, su mandíbula se tenso, sus brazos igual, y sus labios hicieron presión, nunca lo vi así, su mirada estaba llena de ira.

-Harry: Vamos.-Dijo seguro.

-Víctor: Tu quédate aquí, mi hermana me matara si te pasa algo, me dijo que te cuidara.-Ordené.

-Harry: Voy a ir, no me lo vas a impedir, no va a pasar nada, tranquilo, ella no tiene porque saberlo.-Dijo serio.

No tuve más remedio que aceptar y fuimos hacia el ring, aparté a la gente que abucheaban para que estos dos se golpeasen.

Sin pensármelo dos veces subí y Harry detrás de mí. Sergio estaba de espaldas a mí.

Él notó mi presencia y volteo mirándome de arriba abajo con arrogancia.

-Víctor:  Vaya, vaya.. ¿a quién tenemos aquí? Mi gran amigo Sergio.-Sonreí irónicamente mientras me acercaba a él.

-Sergio: Vaya Víctor, estas trabajado eh?.-Bromeó.

Acaba de encender la llama,  sin pensarlo me abalancé sobre él, lo cogí del cuello, mis manos lo apretaban con fuerza.

-Víctor: ¿te crees que ibas a joder a mi hermana y te irías tan tranquilo?.-Escupí.

Él tipo rudo que iba a pelear con él, salió corriendo de allí, quedamos yo, Harry, y Sergio mientras la gente de alrededor nos miraba expectantes, no estaba dispuesto a dar un espectáculo. Solté a Sergio y los miré a todos.

-Víctor: Aquí no se puede pelear, fuera todos cojones.-Grité.

La gente fue saliendo y quedamos los 3 solos.

Yo volví mi vista a Sergio el que miraba a Harry de arriba abajo.

-Sergio: ¿Con qué tu eres el famoso Harry Styles no?.-Se burló.

No dejé a Harry contestar, me fui hacia él y clavé mis nudillos en su boca, su labio comenzó a sangrar.

-Sergio: ¿Qué mierda haces tío?.-Dijo llevándose una de sus manos al labio que chorreaba sangre.

-Víctor: Esto solo es un aperitivo de lo que te espera.-Dije para volver a golpearlo en la cara haciéndole dar pasos hacia atrás.

Me acerqué a él y clavé mis nudillos en su estomago haciendo que este se agachara agarrando la zona golpeada con su brazo.

Me paré mientras lo observaba detenidamente, sentía impotencia de verlo, sabiendo que él tocó a mi hermana. Volví a ir hacia él pero esta vez fue él el que golpeo mi mejilla. Yo retrocedí hacia atrás pasando mi mano por la zona afectada.

-Harry: Víctor para, este no es el sitio, es tu trabajo, puedes tener problemas.-Dijo irritado mientras clavaba sus ojos en los de Sergio.

-Sergio: ¿Ya te has follado a Verónica no?.-Dijo  riendo con arrogancia mientras pasaba su mano por el estomago golpeado. Hablaba con dificultad.

Harry no dijo nada, fue directo a él y golpeo con su puño la boca de este, que comenzó a sangrar más.

-Harry: No te vuelvas a acercar a ella, ¿me oyes?.-Gritó mientras daba un golpe seco en su costilla, haciendo que este de doblase.

-Harry: Ella ahora está conmigo, ella es mía, olvídate de ella o tendrás problemas.-Dicho esto golpeo con su rodilla en su estomago, haciéndolo caer al suelo, abrazando con sus brazos la zona golpeada.

Cuando Harry iba a tirarse encima de él yo lo detuve agarré uno de sus brazos.

-Víctor: no aquí, por hoy ha tenido bastante, no quiero que tengas problemas.-Dije tenso.

Él apretó su mandíbula, me fije en sus brazos y sus venas estaban saltadas, sin duda estaba lleno de rabia. Este chico si amaba a mi hermana.

-Harry:  Sólo lo dejo porque no quiero causarte problemas en tu trabajo.-Dijo soltándose de mi agarre  mientras miraba fijamente a Sergio que estaba aún tirado en el suelo.

-Víctor: Vamos, levántate, ¿con mi hermana tienes cojones y con nosotros no? Ah claro, se me olvidaba que mi hermana solo es una adolescente y es mujer. Eres tan hijo de puta que solo te atreves a encararte con una mujer.-Grité.

Él se retorció en el suelo y se levantó como pudo.

Caminó hasta Harry y quedo frente a él, yo me acerqué corriendo por lo que pudiera pasar.

-Sergio: Peleemos, tú y yo, nadie más.-Dijo con dificultad.

-Harry: Dónde  y cuándo y ahí estaré.-Dijo tenso.

-Sergio: En el descampado de detrás de esto, siempre está solo, y hay un viejo almacén.

No espera, no podía dejar que esto pasase, era peligroso, Sergio estaba loco y era capaz de lo que sea y mi hermana me mataría si se entera.

-Víctor: Aquí nadie va a pelear, si alguien pelea seremos tú y yo.-Dije señalándolo.

Él negó con la cabeza.

-Harry: Tranquilo, después de esto no se volverá a acercar a tu hermana.-Dijo seguro.

-Sergio: Me voy,  si tienes lo que hay que tener, te espero el sábado a las 9 dónde te he dicho.-Dijo dolorido y salió arrastrándose de allí. Él estaba acostumbrado a las golpizas, tenía bastante resistencia.

Harry se bajó corriendo y empezó a golpear sin censura uno de los sacos, yo baje tras él y puse mi mano sobre su hombro, frenándolo.

-Víctor: Harry tranquilo.-Tranquilicé.

Él paro con el maltrato al saco y volteo, me miro fijamente, algo malo iba a decirme, lo notaba.

-Harry: Verónica me confirmo que fue él el que la golpeó en la cabeza, ÉL LA DEJO EN COMA.-Gritó.

Mi cuerpo entero se tenso, yo sabía que alguien había detrás de todo esto, quite mi mano de su hombro y empecé a pasarla por mi pelo, mientras iba caminando de un lado a otro. Si lo fuera sabido lo mato aquí mismo.

Una voz me sacó de mi estado.

-Harry: Será mejor que  desconectemos un rato, vamos a prepararnos y entrenamos.-Dijo serio.

Yo asentí, quizás eso me desahogaría un poco.

Así hicimos, ambos nos colocamos los guantes y empezamos golpeando a los sacos, en silencio absoluto, toda la gente abandonó la zona de boxeo cuando lo dije, solo se oían los golpes que propinábamos al material, nuestras respiraciones tensadas y algún gruñido que otro de nuestras bocas.

-Víctor: ¿Qué tal si peleamos?.-Dije parándome mientras recuperaba la respiración.

-Harry: Vamos.-Dijo agitado.

Subimos de nuevo al ring y comenzamos a pelear, nada serio, ni golpes dolorosos, sabíamos controlar la fuerza.

Después de un rato lo dejamos, fuimos a las duchas y nos cambiamos. Ya era la hora de comer.

-Víctor: ¿Quieres comer en casa? Después puedo llevarte a un pub que está bastante bien y voy muy a menudo.

-Harry: Sí, necesito distraerme un rato.-Dijo pensativo.

Llegamos a mi casa y comimos, vimos un poco la TV y después salimos al pub, le presentaría a algunos amigos y tomaríamos algo, lo que había sucedido esta mañana era algo que no me esperaba, ambos necesitábamos desconectar.

…

Víctor: Nos hemos pasado con las cervezas.-Dije riendo mientras introducía las llaves en la cerradura.

-Harry: Por tu culpa, casi termino ebrio.-Rió.

Terminé de abrir y entramos, llegamos al salón y allí ya estaban mi madre y mi hermana,  pero ¿Carlos? Froté mis ojos un par de veces y los abrí, efectivamente, Carlos estaba aquí, tanta cerveza no es buena. Miré a Harry y este miro a Carlos con cara de confusión.