jueves, 8 de agosto de 2013

Capítulo 24.

CAPÍTULO 24. ‘’Hospital’’.
Narra Harry.

Cuando abrí los ojos, me sentí muy cansado, como si mi cuerpo estuviera agotado, me dolía la cabeza, tenía como una presión extraña en esta  y todo me daba vueltas.
Me incorporé  y me di cuenta de que no estaba en mi habitación. ¿En el hospital? *Me dije*
Estaba en una camilla, con  una aguja en mis venas, que llevaba a una bolsa con un líquido transparente. Tenía la típica bata blanca fea de hospital, no recordaba nada. Solo se me vino a la cabeza, la imagen de una carta, la carta que me escribió ella, Verónica.
Me giré y vi a Liam dormido en el sillón, no quise despertarlo así que esperé a que él lo hiciera.
Pasados 20 minutos de espera, este abrió los ojos, al verme despierto se levantó corriendo y vino a mí.

-Liam: ¡HARRY!-Dijo abrazándome.
-Yo: ¿Qué ha pasado?¿ Que hago aquí?¿Y los demás?.-Pregunte confundido.
-Liam: no recuerdas nada?-Preguntó preocupado.
-Yo: Solo recuerdo la carta de la chica, de Verónica, y un golpe, después de eso no recuerdo nada más.-Dije nervioso.
-Liam: que susto *suspiró*, pensé que habías perdido la memoria.-Dijo angustiado.
-Yo: ya Liam, que ¿qué pasa?¿qué hago aquí?
-Liam: verás, anoche, después de leer la carta, no dijiste nada, te levantaste y te fuiste a tu habitación y al poco rato, oímos un golpe, fuimos y te encontramos tirado en el suelo.  Estabas inconsciente y por eso vinimos aquí, la ambulancia fue a buscarte.-Dijo mirándome serio.
-Yo: ¿ y los demás?
-Liam: Les dije yo mismo que se fueran a descansar que yo me quedaba contigo.
-Yo: y.. que tengo? Cuándo me voy de aquí?
-Liam: te hicieron varias pruebas, pero aún el doctor no vino con los resultados.
Yo solo me mantuve en silencio. Me recosté en la cama ya que estaba muy cansado y me dormí.


Noté como una voz chillona bastante familiar me  hablaba, abrí los ojos y como no, Louis, este hombre no cambia.

-Louis: HAZZA HAZZA NO TE VAYAS TE QUIERO.-Dijo gritando como de costumbre mientras me abrazaba.
-Yo: Louis, sigo aquí no voy a irme.-Dije riendo
-Louis: No te rias, *golpeó mi brazo* sabes el susto que me has dado?
-Yo: ¡Auch! Pues no me pegues que estoy débil.-Dije con cara de enfadado.
-Louis: lo mereces, por darnos estos sustos.
-Yo: BLA BLA BLA.-Bufé.
-Louis: no dijiste nada de la carta.-Dijo intrigado.

Yo suspiré, recordar la carta, recordarla a ella hacía que mi cuerpo experimentara sensaciones nunca antes vividas. Era todo muy raro.

-Yo: me quedé sin palabras, simplemente.
-Louis: me encantaría conocerla y poder darle fuerzas, porque las necesita.-Dijo triste.
-Yo: Necesito verla, necesito encontrarla..-Agaché la mirada.
En ese momento alguien nos interrumpió, era el doctor.
Louis se levantó corriendo y fue hacía él.
Louis: Doctor, que dicen las pruebas? Harry está bien, verdad?-Dijo nervioso.
Doctor:  Siéntese joven.-Le pidió.
Una vez ya sentado, él se paró frente a nosotros y comenzó a hablar.

 Estaba nervioso por lo que el doctor diría a continuación.

-Doctor: veréis, ya tengo aquí los resultados de sus pruebas.-Dijo hojeando los papeles que traía en sus manos.
-Harry: Y bien?-Dije ansioso.
-Doctor: No tienes nada grave joven, *suspiré tranquilo*, los análisis están en regla, y las radiografías de tu cabeza solo presentan alguna contusión leve, pero nada grave, te diste un golpe muy fuerte, que fue a causa de un desmayo, tu tensión esta baja, digamos que sufres bastante estrés, tu cuerpo está agotado.-Terminó.

Si es verdad que con todo lo del tour no había parado, un día aquí, otro allí, para arriba, para abajo, y sí, estaba muy estresado, no me extrañaba para nada lo que decía el doctor.

-Louis: Y bien doctor, si está bien, cuando le dan el alta?
-Doctor: No exactamente.. veréis, él está muy agotado, y tiene alguna contusión en la cabeza, el deberá permanecer una semanas aquí para que acabe de reponerse y este del  todo bien, si ahora mismo se fuera, le volvería a dar otro mareo.-Dijo serio. Chicos, es por seguridad.-Dijo tranquilizador.
-Yo: Es decir, que me tengo que quedar aquí unas semanas no?-Dije pesado.
-Doctor: Si muchacho, ahora me tengo que ir, más tarde te traerán el almuerzo. -Dicho esto, salió de la habitación.
-Yo: y ahora qué?
-Louis: Ahora qué de qué? –Dijo poniendo caras raras, no pude evitar  reírme.
-Yo: Louis.. el tour, TODO!-Dije alterado.
-Louis: Estas loco? Ahora no te preocupes por eso, aquí lo importa es TÚ salud. –Dijo apuntándome con el dedo. Además solo serán un par de semanas, el tour se aplaza y cuando estés bien volvemos al ataque. –dijo sonriente.
-Yo: si no hay más remedio..-Dije resignado.
-Louis: Voy al hotel, me daré un ducha y avisaré a todos de lo que pasa, no te preocupes, luego vendremos.-Dicho esto salió de la habitación.

Me  tumbé en la cama, con la mirada perdida. De repente, me acordé de la 
carta, no recuerdo dónde la dejé, la necesitaba así que llamé a Louis.

‘Conversación telefónica’

-Louis: Harry, ¿ qué pasó?-Dijo asustado.
-Yo: No tranquilo, nada, solo te llamaba para que buscaras la carta en mi habitación y me trajeras cuando vuelvas aquí.-Dije nervioso, tenía miedo de haberla perdido.
-Louis: De acuerdo, bueno te dejo que voy manejando no vaya a ser que acabe haciéndote compañía ahí.-Dijo chistoso.
-Yo: Hasta luego y gracias.

‘Fin de la conversación telefónica’

Solté mi móvil en la mesita, y me volví a tumbar, no sé porque sentía a esa chica demasiado cerca de mí, como si estuviera en el mismo lugar que yo, sentía unos sentimientos extraños, lo que tenía claro es que la tenía que ver.  ¿Y si no seguía viva?¿Y si llego tarde? Una mar de dudas invadió por completo mi mente..
Sumergido en mis pensamientos, caí dormido.

-Louis: Harry, despierta,  HARRY!
Esa voz chillona de nuevo interrumpiendo mi sueño.
Abrí los ojos y me encontré con Louis , que nunca  cambia. *suspiré*

-Yo: ¿Cuándo aprenderás a despertarme como un ser humano normal?-Vacilé mientras frotaba mis ojos.
-Louis:  Eh, que yo soy normal.-Dijo muy tranquilo.
-Yo: Sí, ya.. ¿Bueno trajiste   lo que te pedí?
-Louis: Sí, la dejaste en la mesita de tu habitación.-Dijo mientras me la entregaba.
La tomé en mis manos y miles de sensaciones recorrieron todo mi cuerpo.

-Louis:  ¿Dónde estará ella ahora?-Dijo con curiosidad.
-Yo: Eso me gustaría saber a mí.-Dije en un gran suspiro.
-Louis: Tú crees que ella…pues, eso, ya sabes..-insinuó triste.
Sabía lo que quería decir.
-Yo: No, no quiero pensarlo, ella es fuerte.-Dije firme.
-Louis: Ojala, pero..¿ cómo lo sabes? Digo, que es fuerte.-Pregunto confundido.
-Yo:  Porque  esta carta solo podría escribirla alguien como ella, alguien fuerte.-Dije seguro.
..


Ese día en el hospital fue bastante aburrido y pensar que me quedaban dos semanas que pasar aquí, me moría del aburrimiento. Antes de dormir, volví a leer esa carta, la guardé en el cajón junto a mi móvil y me dormí pensando en ella..

No hay comentarios:

Publicar un comentario