Capítulo 30.

CAPÍTULO 30. ‘’Ella’’ 2ª Parte.

Narra Harry.

Ya habían pasado más de 15 minutos desde que estábamos esperando a Víctor y Zayn. Yo estaba más nervioso aún y arto de esperar.

Los chicos hablaban entre ellos, yo estaba ausente.

La puerta se abrió y eran ellos.  Me quedé impactado, no me imagine que el hermano de Verónica fuera así, caminaba muy seguro y sí, se notaba que era monitor en el gimnasio.-Reí en mi interior.

Se acercó a mí.

-Víctor: Por fin conozco al famoso Harry.-Dijo estrechando su mano con la mía.

-Yo: con qué famoso?-Reí.

-Víctor: mi hermana nunca paró de hablar de ti y muchos menos nunca soltó esa foto que siempre lleva con ella.-Dijo sentándose a mi lado, parecía simpático.

En ese momento me acordé de ella.

-Yo: ¿Foto?.-Dije confuso.

-Víctor: Sí, la recortó de no sé dónde y desde entonces no se ha separado de ella.-Dijo con una leve sonrisa.

-Yo: Vaya, me alaga.-sonreí.

Después de un rato hablando con Víctor, vi que era un chico increíble que daba la vida por su hermana, era una brillante persona, también quedamos en que  iríamos al gimnasio para practicar un poco de boxeo cuando me pusiera bien.

-Niall: Bueno chicos, que tal si vamos ya?.-Dijo ansioso.

-Yo: sí, vamos.-Dije sonriendo.

Víctor me ayudó a levantarme y todos fuimos a su habitación, por lo que vi estaba en mi planta, tomamos el mismo camino que había tomado yo para ver a la chica de ayer.

No lo podía creer, Víctor se paro en la puerta de la 107. ¿esto era un broma? Verónica era la chica que yo vi ayer?¿ A la que hace una hora volví a visitar?¿ A la que le susurré que era hermosa? ¿esa que me transmitía un millón de sensaciones nuevas? Estaba en estado de shock, mi cara seguro tenía que ser un claro poema. Me quedé parado, no podía moverme.

Una mano tocó mi brazo, salí de mi trance me giré y era Liam , me miraba extrañado.

-Liam: ¿Qué pasa?.-Dijo preocupado, seguro vio mi cara.

-Yo: No nada, solo pensaba.-Mentí.

El asintió poco convencido.

Víctor abrió la puerta, entraron todos y por último yo.

Era ella.. ella era Verónica.

La volví a ver igual de dormida que las anteriores veces, con su cara pálida y su pelo cayendo en la cama. Jamás imaginé que sería ella. Todos se acercaron y se pusieron alrededor de la cama, observándola. Víctor solo suspiró y se fue hacia la ventana. Los chicos se acercaron para abrazarla, besarla y lanzarle mensajes, ¿ella escucharía? ¿Sería consciente de lo que estaba pasando? ¿me escuchó las dos veces que vine a verla? –Un puñado de dudas empezaron a surgir en mí. El volver a verla, ahora sabiendo quién era, me hizo sentir como nunca antes,  un escalofrío recorría todo mi cuerpo, no podía evitarlo, ella hacia algo en mí.

Me acerqué a Víctor que estaba en la ventana,  podía notar su tristeza.

Yo: ¿Por qué esta así?.-Me armé de valor.

Él volteó y me miro, su mirada era triste, pero a la vez cargada de rabia, de dolor, de impotencia.

-Víctor: Una historia muy larga, ha sufrido mucho, ¿Sabes? Cuando fui a buscaros para darte la carta, lo hice, me arriesgué pese a las consecuencias.  Harry *se acercó a mí y puso su mano en mi hombro* gracias, gracias por hacer que mi hermana *tragó saliva* que ella..dejara de cortarse, por lo menos no tanto como antes. *dijo extremadamente serio*

Me quedé frío, Víctor no dejaba de mirarme fijamente a los ojos, mientras decía esto. Podía verlo agradecido, pero, ¿porqué yo? Esto era demasiado grande. ¿yo había salvado la vida de alguien? Muchas veces me lo dijeron, es cierto, pero  este caso lo estoy viviendo desde cerca y es muy ¿raro?¿extraño?¿increíble? ni yo lo sé.

-Víctor: Gracias, de verdad, a ti y a los cinco. Lo verás surrealista pero sois los únicos capaces de frenar a mi hermana ante cualquier tipo de locura. Ella os quiere, ella..*balbuceó* ella ..te quiere.-Dicho esto quitó su mano de mi hombro y volteo de nuevo para la ventana.

Yo me quedé en blanco, estaba demasiado impactado, ¿cómo en dos días podía cambiar tanto mi vida? En mi cabeza había mil cosas circulando.

Me giré de nuevo hacia la cama de Verónica, ella seguí intacta y los chicos seguían en lo mismo, los cuatro pendientes de ella.

Mi vista fue dirigida hacia una mesita que estaba al lado de su cama, en ella había algunas cosas, pero me di cuenta que había una foto mía, me acerqué y la cogí, se veía algo arrugada, tendría bastante tiempo, y la cogería mucho.-Supuse.  La verdad que esta foto me trajo muchos recuerdos, era de hace 3 años más o menos, cuando todo empezó, estaba tan niño.-Sonreí emocionado.

Esta sería la famosa foto de la que Víctor me habló. Después de unos minutos la dejé dónde estaba. Cuando ya llevábamos una casi una hora allí, le pedí a ellos que me dejaran a solas con ella, Víctor no puso impedimento, salieron y yo me senté en el borde de la cama, como siempre y..